La cueva también conocida como de "las Campanas" por las formaciones que el agua y las reacciones químicas con las rocas calizas han originado el carbonato cálcico, que ha producido formas tan caprichosas como campanas. Está declarada Bien de Interés Cultural y Monumento Natural de Andalucía.
En un trenecito, recorrimos las empinadas y estrechas calles del pueblo hasta llegar a las cuevas a unos 1000 metros de altura.
Divididos en pequeños grupos y contando con la ayuda de guías, recorrimos la parte visitable de la misma, que fue refugio primero de animales en el cuaternario y posteriormente en el Paleolítico Superior, la habitaron nuestros antepasados. De una forma lúdica e instructiva, contando con las explicaciones de las guías , la exacta recreación de utensilios, herramientas, armas, animales, hombres de esa época y aportando algunos alumnos sus conocimientos sobre la prehistoria, viajamos hasta el Neolítico.
De nuevo en la granja-escuela, se participó en diversos talleres, dependiendo de la edad de los alumnos.
También tuvimos, la oportunidad de participar en una actividad formativa sobre las rapaces, donde el buen hacer y la vocación del maestro cetrero, Lino, la convirtió en una instructiva a la vez que entretenida manera de conocer el mundo de las reinas de las aves.
Hoy son muy abundantes los lugares, la mayoría quizás no apropiados, en que se muestra las rapaces y en muchas ocasiones con gran desconocimiento de las mismas por parte de sus propietarios y no en las mejores condiciones de limpieza y manipulación.
Es de agradecer a personas como Lino, que desempeñan esta tarea con mimo, cariño y gran conocimiento hacía sus rapaces y además hacen un gran servicio con su labor didáctica, que ayude a su conservación en su estado natural.
Entre otras nociones enseñó las principales diferencias entre las rapaces nocturnas y diurnas, hábitos de las mismas, a diferenciar algunas especies por su silueta en vuelo...
Los que nos iniciamos en los conocimientos de la cetrería a través del recordado Félix Rodriguez de la Fuente y de su "querido amigo" Aurelio Pérez, agradecemos que todavía halla personas como Lino, que disfruten divulgando estos temas.
Algunas de las rapaces que se pudieron observar fueron: el gran buho real, en concreto una hembra, lechuzas, hálcones, águilas y no por ser el más pequeño nuestro vecino (lo podéis observar parado en el cielo, mientras acecha algún ratón o saltamontes al lado del cole) el cernícalo.
Por último y tras volar algunas de ellas, los alumnos que estuvieron más atentos pudieron compartir unos momentos con estas majestuosas aves.
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