Basurero en el mar. Fuente: El País |
La tristemente famosa "isla de plástico", de la que ya nos hemos ocupado en alguna entrada, sigue aumentando su tamaño. Situada en el Océano Pacífico, su tamaño por ahora, ya que no para de crecer, es de un tamaño equivalente a España, Alemania y Francia juntas.
No hay una única solución para revertir esta situación, pero si que desde todos los estamentos podemos contribuir a su mejora.
Por ejemplo evitando las bolsas de plástico de un sólo uso. En Europa se utilizan 100.000 millones de bolsas de plástico cada año, el 90% de un solo uso. Bolsas que tardarán en descomponerse más de 400 años y que contaminan a más de 1300 especies diferentes de seres vivos.
Otra gran ayuda consistiría en implantar el sistema que ya funciona en otros países y que se ha demostrado muy eficaz, el de la devolución y retorno de las botellas, latas y otros envases. No sólo se reciclarían estos envases, sino que también no los veríamos afeando y contaminado nuestras ciudades, campos, playas... Sería tan fácil como gravar estos envases y devolver esta cantidad al devolverlos.
Esperemos que antes de que se cumpla el pronóstico según el cual, de seguir así, en un futuro próximo habrá más plástico en los océanos que peces, seamos capaces de comprender la importancia de reducir el consumo de plásticos.
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